29 ella y 32 él. Rusa ella y mitad ruso mitad alemán él. Han sido nuestros host en Beijing y los responsables de agilizar al máximo la primera “descomprensión”. Viven en la planta 22 de un enorme edifico y su apartamento tiene acceso a la azotea desde donde se puede disfrutar de unas espectaculares vistas.
Nastia e Igor estudiaron la titulación de chino en la universidad de Moscú, pasaron un año de intercambio en el país y se quedaron en él a trabajar. Igor en una agencia de viajes y Nastia en una empresa de exportaciones a Rusia. De esto hace ya más de 3 años, por lo que tienen anécdotas “para dar y regalar” de su experiencia en China. Nastia, por ejemplo, se hizo pasar por canadiense para dar clases de inglés. Nunca pensó que la mitad de su clase serían adolescentes tan rusos como ella, que se pasaban el día diciendo “tacos” para comprobar si su english teacher era una verdadera canadiense. Así desarrolló sus dotes artísticas mientras ponía cara de “ehhhhh…what do you mean? I dont underrrrrrstand you”.
Cuando les preguntamos por qué habían decido estudiar chino ni siquiera ellos sabían qué respondernos, aunque Igor tenía claro que podría haber elegido cualquier otra carrera más “normal”. Sin embargo cuando llegó el momento sintió que le gustaría hacer “algo más”. Y ya lo creo que lo hizo. Los dos escriben y hablan chino perfectamente, además de inglés, ruso y alemán. Lo que más les gusta de China es que por mucho tiempo que lleves en ella cada día te sorprende con algo nuevo: un hombre vendiendo una enorme tortuga colgada de un palo en mitad de la calle o la venta de “huevos de imitación” junto con los reales. Y como dice Nastia… ¿no será más barato comprar un pollo que inventar una máquina que produzca huevos falsos?
Definitivamente los lugares los hacen las personas, por eso conocer Beijing a través de sus ojos ha sido un privilegio. Aparte de ayudarnos al reservar nuestros tickets de tren a Shanghai y otros temas logísticos, han tratado de transmitirnos lo que ellos han descubierto poco a poco en estos 3 años, siempre con una sonrisa, con una cerveza (por si echábamos de menos La Latina) o disfrutando de una cena en cualquiera de los puestos callejeros. Con ellos hemos probado el zhajiang mian (salsa de pato para noodles), pai huang fua (pepino aliñado), suan mei tang (bebida de ciruela), el mangosteen (una especie de lichi), el jian binp (una torta frita para desayunar con huevo, lechuga, pollo y salchicha), la versión china del edamame y las pequeñas judías verdes, además de los mejores noodles y dumplings de la ciudad. Y es que Nastia e Igor son unos enormes amantes de la cocina y la cultura china y gracias a ellos ahora también lo somos nosotros.
Curiosidades aprendidas gracias a Nastia e Igor:
- Los templos están orientados hacia el norte y delante de ellos se suele construir un muro para espantar a los espíritus.
- Pedir perdón no es una disculpa, es más bien una forma de transmitirle al otro que tu tiempo vale más que el suyo y no quieres perderlo con él. Así que ojo con los perdones que nosotros somos muy dados al “Sorry”.
- Humor Amarillo es un programa japonés, no chino y a ellos les hace la misma gracia que a nosotros.
12 Comentarios
Vuestro blog es muy divertido y ameno de leer y hacéis una pareja maravillosa. Mi mujer rusa acaba de leer este articulo sobre sus dos compatriotas que viven en China y le ha encantado, no sabíamos que habia tantos ciudadanos de esta nacionalidad viviendo en ese país asiático, que cosa mas curiosa. Los rusos curiosamente suelen elegir destinos cálidos con costa, en España la mayoría de ellos viven cerca del mediterráneo. Despues de leer vuestro post sobre china para celebrar nuestro aniversario de matrimonio a mi esposa rusa y a mi nos habéis abierto las ganas de visitarla y hemos mirado en una agencia unos vuelos y la visitaremos en breve, que os vaya bien, muchas gracias y seguir asi
This was one of the best things I’ve ever seen.
Supongo que llevareis los nombres de las comidas en alguna libreta, son un poco difíciles de recordar.
Bueno, yo también estoy apuntada al viaje desde el Albayzín (por cierto, el viernes me crucé con Paloma y Gádor por Santa Isabel la Real) para conocer vuestra experiencia viajera. Muchos besos a los dos y muchos miau de la familia gatuna.
No sin mi libreta Lola! No somos nadie sin ella…besos a la familia gatuna y no gatuna en orden inverso
vaya pol dio, te has tenido que ir a china pala conocel a aigor del pequeño froncostin.
ahola en selio , vamos a aplendel mucho con vuelto viaje.
un abrazo y suelte
Igor es un galán… un señor y un gran couch. Será culpa del fotógrafo aunque yo, le veo bien guapo, la verdad 🙂 Intentaremos que vengáis con nosotros en este viaje lo más posible. Intentamos que también sea el vuestro.
Sólo lleváis unos días y ya estoy enganchandome con vuestro viaje . Es como un libro que te esta gustando y estas deseando encontrar cualquier momento para leer unas páginas más ..
Rocíooooooo!!! Gracias… se hace lo que se puede. Entre hostel sin wifi y cafetería con velocidad 0,2G. A ver si cuando salgamos de China le damos un poco más de ritmo. Aunque no sé yo si en Laos…
¡¡¡¡¡cuanto vamos a aprender todos con este viaje vuestro!!!!!. Muchas gracias por compartirlo con nosotros.
Este blog engancha (palabras del tito Rincón)
jijijiji! Mamuchi querida…estoy segura que te encantaría la comida china más de lo que te imaginas…besos grandes también para el tito Rincón.
Qué alegría leer que va tan bien el viaje!!!! Siento un extraño orgullo, que sin conocerlos me transmiten, por la manera que que han hecho las cosas. Supongo que es el sueño de muchos y ver que se puede realizar y poder seguir en “directo” el proceso, es una motivación. Les deseo muchas aventuras, conocimiento y que todo salga “rodado”!!! Otra curiosidad, si me permiten, cuando tomen cualquier tipo de sopa, nunca dejen los palillos dentro del cuenco, sino en horizontal sobre el borde superior. Es una falta de respeto, dicen que los palillos en vertical recuerdan a los inciensos que ponen a sus muertos, así que por sí las moscas…. No les pierdo la pista!!!! Saludos chicos!!!!
Cierto!!! Y otra curiosidad más es que en Beijing no hay perros grandes porque están prohibidos. Muchas gracias por los buenos deseos y, sobre todo… por viajar con nosotros!