Presupuesto diario en Indonesia

Si te has preguntado cuál es el presupuesto diario viajando por Indonesia en plan mochilero (sin sufrir, aunque sin lujos), aquí va un artículo lleno de consejos con el que te vas a hacer una idea.

Actualizado 11/03/18

Para explicar lo que hemos sentido en Indonesia, podríamos decir que nos hemos quedado sin palabras… 34 días, una extensión de VISA, 4 islas… volcanes, montañas, ciudades, playas paradisíacas, jungla, culturas ancestrales, especies animales únicas… y aún así, salimos el país  con la sensación de no conocer ni el 10% de todo lo que Indonesia puede ofrecernos. En algo más de un mes de visita hemos experimentado la sorpresa en tantas ocasiones que definitivamente pensamos volver. Indonesia ha conseguido lo que ningún otro país desde que empezamos esta aventura. Se nos ha ido de las manos en los días de visado, en nuestro rígido presupuesto diario, en evitar los vuelos internos… Indonesia nos ha vuelto totalmente locos. ¿Naturaleza de ensueño? ¿Un concepto de la hospitalidad que va mucho más allá de todo lo que antes habíamos visto? ¿Todo junto? No sabemos si hay un motivo único o es la suma de varios pero desde luego, si eso es lo que querías, Indonesia, lo has conseguido. Volveremos a vernos las caras. No te quepa la menor duda.

La gente

Sin saber lo que es couchsurfing o formando parte de esta red, los indonesios son increíblemente hospitalarios a todos los niveles y cuanto más nos hemos alejado de las grandes ciudades, esta realidad se ha multiplicado exponencialmente. Incluso las personas  más acostumbradas a tratar con los extranjeros entienden que no todos tenemos las mismas posibilidades económicas, que los objetivos de cada uno en el viaje pueden ser muy diferentes y están dispuestos a adaptarse de la mejor manera posible a nuestra realidad.

El país es mayoritariamente musulmán (salvo algunas zonas concretas católicas como Isla Samosir), con una forma muy abierta de entender la religión, en general. Puedes encontrar musulmanes con tatuajes, que beben, que rezan dos veces al día, cinco o ninguna e incluso con diferentes prácticas dentro de la misma familia.

La ducha (a cubazos) es un ritual que se lleva a cabo como mínimo dos veces al día por varios motivos… El primero es que el uso del papel higiénico no está lo que se dice muy extendido, aquí como en muchos países de Asia se lleva “el chorrillo”. El otro motivo es que antes de rezar hay que lavarse, tanto uno mismo como el lugar en el que se va a realizar el rezo y por eso la higiene se mantiene tan escrupulosamente dentro de las casas. Imagina lo que piensan de nosotros cuando ven que pasamos por debajo de la alcachofa solo una vez al día. Que relativo es todo, ¿verdad?

Otro punto de unión entre indonesios y españoles es el idioma. El indonesio, con muchos puntos en común con el malayo, también se lee igual que se escribe. En un mes por estas tierras puedes llegar a mantener una conversación básica de esas que abre muchas puertas y genera muchas risas alrededor.

Todo hay que decirlo… en las estaciones, en la puerta de los templos y en las zonas más turísticas hay pícaros dispuestos a intentar sacar de ti todo lo posible. Si te prestas a ello, no tienes ganas de discutir o te pillan en uno de esos días del mes de despiste, se aprovecharán de la situación.

La comida  

Aunque también hay platos vegetarianos (como el gado-gado) y por supuesto comida internacional en los lugares más turísticos, la carne y sobre todo “la fritanga”, están por todas partes. Lo peor de todo es que te la zampas a dos carrillos, salada y algo más saludable como el “tempe” (cuyo ingrediente principal es la soja) o dulce como donuts caseros y las “molan”, una especie de profiteroles rellenos de chocolate, piña, plátano o fresa. Los satays (o pinchitos de toda la vida) inundan todas las esquinas y el alcohol baja sus precios con respecto a Malasia, cosa que hace que te permitas más cervecitas. ¡Para qué queremos más!

Por supuesto el arroz sigue siendo el acompañante estrella de todas las comidas y en los restaurantes locales triunfa el nassi campur, una mezcla de un poquito de todos los platos del día sobre una hoja de plátano con los bordes quemados y acompañado (en muchas ocasiones) de una sopa.

En las zonas costeras también se puede disfrutar de pescado a la plancha o a la barbacoa como dicen ellos. Los amantes del café aquí somos felices. Con sus posos, su alta densidad y su fuerte sabor, en Indonesia no hace falta pagar el café más caro del mundo (café Lebak) para disfrutar de una buena taza.

Los transportes y los accesos

Dependiendo de la isla, las conexiones (especialmente por tierra), se complican de mucho a muchísimo. Estamos hablando de traslados que pueden durar hasta 48 horas con intercambios de conductores, ferrys de por medio y múltiples paradas. Todo esto es perfectamente solucionable con los vuelos internos que aunque tienen muy mala fama de cara a occidente, los dos que cogimos, no nos dieron ningún tipo de problema (ni siquiera con respecto al horario).

Las grandes ciudades indonesias no resultan fáciles si eres de los que te gusta pasear. Las aceras, si es que las hay, están echas polvo y el tráfico es arrollador. Nosotros nos empeñamos en ir andando a todas partes pero es cierto que los taxis, moto-taxis o bici-taxis no son muy caros.

Presupuesto diario

Aquí van los números de los 34 días en el país que ha conseguido darnos la vuelta a la cabeza.

Gastos para 2 personas en 34 días:1.364€. Lo que hace una media diaria de 40€ (el país más barato hasta la fecha donde nos hemos gastado más dinero) divididos en:

– Alojamiento: 145€. Con muy poco couchsurfing. La relación calidad-precio del alojamiento es muy buena y ya hemos comentado que por ejemplo en la isla de Borneo no pisamos un hostel gracias a la hospitalidad de los indonesios.

– Comida: 276€. Una considerable reducción con respecto a Malasia teniendo en cuenta que en las playas de Kuta comimos en restaurantes internacionales.

– Bebidas: 37,81€. Hubo cervecitas pero se ha notado la bajada del precio general del alcohol.

– Transportes: 240€ (sin incluir los dos vuelos internos de unos 50€ cada uno por cabeza).

– Actividades: 463€. Aquí está la madre del cordero. Casi el 34% del gasto total. La partida mayor. En Indonesia es difícil resistirse a todo lo que se puede hacer: snorkel, surfing, perderse con una moto durante tres días, las entradas a los parques nacionales, la visita a los orangutanes en Tanjung Puting…

– Otros: 151€. Incluye una compra de material técnico de montaña (chaquetas, mochila impermeable, braga, gorros…) que ascendió a unos 50€.

A estos números hay que sumarle el coste de la VISA de 37€ (18,5€ por persona), la extensión de 32€ (16€ por persona) y las tasas de los aeropuertos locales que rondan los 2€ por cabeza..

Con todo-todo-todo, tenemos una media de 48€ al día entre los dos. 

Conclusión 1: Indonesia se nos ha ido de las manos.

Conclusión 2: Que nos quiten lo “bailao”.

Ejemplos “del coste de la vida”

– Botella de agua: 10.000 Rupias. Hay muchos sitios donde rellenar las botellas (refill) y ahorrarse unas rupias.

– Hostel (habitación doble): 100.000 Rupias

– Café: 2.500 Rupias

– Cerveza de litro: 20.000 Rupias