Te bajas con el W en Lexignton Av/59 y bajas dando un paseo por Park Avenue pasando por delante de la St. Patrick´s Cathedral, y el Rockefeller Center. Saludas al edificio Chrysler y entras en la estación Grand Central para alucinar con el gran movimiento que hay en todas direcciones.
Te das una vuelta por sus galerías de comida y te compras una hamburguesa en el Shake Shack que te comes sobre el césped del Bryant Park. Ahora sí, llega el momento que estabas esperando… vas hacia Times Square y, con ciertos nervios, te plantas bajo sus miles de luces y carteles.
No puedes evitarlo y haces cientos de fotos sin sentido ni sensibilidad. Cuando recuperas la cordura, te enteras de que a New Jersey se va con un tren llamado PATH que sale desde la 33 St. con la 6ª Avenida. Sales en la parada Grove y descubres un barrio lleno de vida y con mucho sabor.
Hay varios restaurantes interesantes y un montón de casas más que curiosas con bonitos graffitis. Te paras a ver una actuación callejera improvisada y descubres el Barcade, un lugar donde tomar una cerveza y jugar a máquinas retro de los años 80 sin que parezcas un bicho raro. Paseando de camino casi al atardecer hasta la parada Exchange del PATH, llegas a un precioso mirador en el J Owen Grundy Park del que no habías oído hablar y en el que hay una vista de todo Manhattan increíble. Probablemente, la panorámica más completa de su skyline.
Con un par de buenas fotos, te vuelves a Queens esperando que una señal te indique qué hacer mañana ya que el domingo quieres ir a una iglesia de gospel en Harlem y a Central Park. Y la señal llega. Desde el metro ves un bonito y antiguo cartel publicitario de Pepsi y unos miradores sobre el río que tienen buena pinta así que…