Actualizado 15/01/2018

Hay varias formas de interactuar con la gente local en viaje. Quedarse en sus casas es, probablemente, con la que más puedes profundizar.

Todo depende del momento vital en el que te encuentres. Si viajas en familia, probablemente te interese más el intercambio de casas, o el woofing. Si viajas solo o en pareja, el couchsurfing es una buena opción. Si no quieres hablar con nadie y te gustan los animales, prueba con el House Sitting 😉

Para quien no lo sepa, el couchsurfing es un complemento a tener muy en cuenta a la hora de viajar. La propuesta, muy generosa. El fondo, enriquecedor. La forma, altamente ingeniosa. El couchsurfing consiste básicamente, en que el viajero pueda tener “un sofá” gratis donde dormir en casa de unos anfitriones locales. A partir de ahí, lo mejor y más interesante es el intercambio de experiencias que se produce. El viajero hace que los anfitriones viajen a través de sus historias y los anfitriones le pueden enseñar sitios y costumbres que de otra manera, el viajero probablemente no conocería.

Couching: El couching es “el arte” de alojar en casa a un extraño. De prestarle por unos días ese sofá en el que, después de repetir el mismo día de oficina de siempre, te sientas a perder el tiempo frente al televisor. Es enseñar tu ciudad. Es llevarte a alguien que no sabe nada de español de marcha con tus amigos. Es cocinar para alguien que puede que no le guste el jamón, jamás haya comido pulpo o le de asco la oreja. Es… tratar a alguien como te gustaría que te trataran a ti si fueses a casa de un “futuro amigo” al que aún no conoces de nada.

Surfing: El surfing “de tierra”, es la habilidad de ir esquivando hostels para ir saltando de casa en casa de extraños. Extraños con los que, después de compartir tres o cuatro días con ellos, sientes que tienes más cosas en común que con un compañero de trabajo que conoces hace 6 años. Un buen surfer no nace… se hace. Y se hace mejor a base de depurar la técnica de saber escuchar, querer experimentar, no tener miedo a probar y, por supuesto… de ser agradecido con la hospitalidad y confianza que se te ofrece. El surfing es la posibilidad de conocer gente totalmente diferente a ti desde dentro. Sin maquillaje. Es la sensación de que por instantes, te puedas llegar a sentir uno de ellos… Es tener la oportunidad de vivir otras vidas que no tienen nada que ver con la tuya.

que_es_el_couchsurfing_algo_que_recordar_04Involucrarte más o menos con tu anfitrión o huesped, sólo depende de ti. En cualquier caso y a priori, todo son ventajas aunque puede que des con alguien con quien no haya mucha conexión o que no sea muy limpio… vamos, como en cualquier parte.

Decir que haces couchsurfing, le suena a mucha gente como si hicieras intercambio de parejas o tríos. Hay muchos que ven en esta práctica, un punto de locura o irresponsabilidad.

– ¡¡¡¿Habéis metido a un tío que no conocéis de nada en casa?!!!

– Sí… y le hemos dejado las llaves y le hemos dicho que coja lo que quiera de la nevera… que esté cómodo.

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Es posible que en general todos seamos un poco desconfiados y eso, hace que nos perdamos cosas. Las mejores personas, la mejor comida, las mejores costumbres… no son las que tenemos donde hemos tenido “la suerte” de haber nacido. Es decir, las únicas que conocemos. Atravesar ese muro de miedos, complejos y prejuicios, hace que un día… te encuentres en cocinando una tortilla de patatas para una familia camboyana o en una azotea en Polonia bailando salsa con gente que te sonríe como si te conociera de toda la vida.

Just try it.

 

 

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