Del 16 al 18 de julio de 2013 // Temperatura: 29º // Alternando niebla, sol y gotas de lluvia.

La razón fundamental de dirigirte a esta ciudad era conocer las legendarias Montañas de la Niebla. Muchos artistas se han inspirado en ellas para sus obras y son uno de los principales atractivos naturales del país. De hecho, resultan muy familiares… y es que en España no hay restaurante chino que se precie sin leones dorados en la puerta, lámparas rojas (color de la felicidad) y cuadros en las paredes con las montañas de Huangshan.

La opción más barata para pernoctar es Tangkou, un pueblo que está al pie de las montañas y que es bastante horroroso. Básicamente una calle con tiendas, hoteles caros con pinta chunga y restaurantes mediocres. Además de un río muy sucio y “venga de grúas” por todas partes para construir y construir y construir…  No tienes mucha suerte con la habitación del hostel pero estás en primera línea de salida para coger los autobuses que suben al parque. Por buscarle algo positivo estrenas el saco sábana y te hace ilusión ver que por aquí también pasaron los amigos del Paso del Noroeste.

Huangshan_algo_que_recordar2Venga que a ver si con un buen madrugón te garantizas un rato de soledad…. Sí…ya… Todavía te preguntas de dónde salieron los 5.000 chinos que aparecieron a las 7h de la mañana en las montañas de Huangshan. Cada grupo perfectamente marcado con su gorra (roja, amarilla o amarilla y roja). Siguiendo a un guía con la bandera correspondiente que solo para de hablar por el micrófono para beber té e incluso en algunas ocasiones “ameniza” con música la visita. El funicular de la entrada del Este sube nada más y nada menos que a 2.000 personas por hora (y hay otro más en el oeste). Así que a las 9h de la mañana rondaban unos 4.000 andando por allí más los 2.000 que seguían subiendo cada hora.

Huangshan_algo_que_recordar3Conclusión: la primera parte de las espectaculares vistas de las montañas se hace un poco estresante. Pero nada como llegar al segundo funicular en el que perder a todos los grupos y al fin disfrutar de la bajada en solitario. ¡Esto ya es otra cosa! El precio a pagar son unas agujetas de caballo al día siguiente a cambio de un poco de silencio y la posibilidad de ver a los porteadores subiendo y bajando a pulso la comida para los hoteles de la cumbre. ¿Por qué no les dejarán usar el funicular? Incluso utilizan este método para subir los materiales de las obras y todas la montañas están cubiertas de escalones. Te preguntas cuantas espaldas se habrán quedado por el camino.

Huangshan_algo_que_recordar4La entrada al Parque Natural es cara, y además cuando llegas arriba te das cuenta de que no llevas dinero suficiente… Suele pasar… Así que toca jugársela todo a una carta. Los falsos “carnets de estudiantes” y ¡funciona! (Perdónanos UNED por malversar tu nombre en vano pero es que da tanto gustillo eso de hacer trampas sin que nadie se dé cuenta. De hecho, hacerlo mola más por el gustillo que por el dinero que te ahorras en realidad. Así de cutres somos. Todo por un 50% de descuento).

Huangshan_algo_que_recordar5Gracias a las 4 intrépidas estudiantes de arquitectura madrileñas (Lorna, Elena, Marta y Raquel) que conoces en uno de esos momentos en los que todo el mundo se quiere hacer fotos con los lowai, te enteras de una buena conexión por tren con el sur. En Tangkou no hubo manera de encontrar a alguien que diera algo de información al respecto ni en las propias agencias de viaje. Con el lío que tienen para atender al turismo local los de fuera somos más un marrón que otra cosa. Consigues tickets de tren para el día siguiente en hard seat y aprovechas para pasear sonriente por la ciudad. No sabías la que se venía encima… Desde luego que la ignorancia da la felicidad. Y si no, que se lo digan a este monito de las montañas.

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