Estos son, aquí están, nuestros lugares favoritos (no secretos) de Canarias en los que sentir espacio alrededor este verano.
Es la isla más grande y la más variada. No es tan extrema, salvaje o única como otras, pero tiene un poco de todo y de todas. Hay volcán, hay playas, hay monte… Por eso, solemos aconsejarla como primera opción si nunca se ha estado en las islas. Aunque hay mucha gente en general y las zonas turísticas como Playa de las Américas o Los Cristianos nos repelen un poco, es una isla ideal para hacerse una idea de lo que te puedes encontrar en Canarias.
Curiosidades: algo que se nos hace inevitable, es ir buscando el Teide con la mirada desde cualquier parte de la isla. De alguna manera, es como un faro que todo lo controla.
Nos quedamos con…
1) Más que subir al Teide (normalmente hay mucha cola a no ser que subas a pie), lo que nos encanta es andar por las Cañadas. Sin rumbo concreto. Disfrutando del silencio, de los distintos colores de la tierra y de esa inmensidad que flota sobre el mar de nubes.
2) Los montes de la Punta de Anaga. Levántate y anda… Poco más se puede decir. Ver verde y pisar marrón, es una de nuestras debilidades y/o necesidades.
3) Almáciga. Un trocito de fin del mundo. Esas playas de arena negra que dan paso a un mar salpicado de peñascos relaja la vista de un solo golpe.
La Palma
La llaman “la isla bonita” y es que, bonita, es un rato. Tanto, tanto, como incómoda de conducir. Arriba, abajo, curva para acá, curva para allá… Ideal para conocerla sin prisas y siempre avanzando. Mirando los cielos estrellados y disfrutando de cientos de caminos entre calderas y volcanes.
Curiosidad: La Palma tiene un montón de lugares secretos que son una maravilla. Pero bueno, ¿quiénes somos nosotros para desvelarlos en público?
Nos quedamos con…
1) La Caldera de Taburiente para ser andada o contemplada desde el Roque de los Muchachos. Por momentos, solo la Naturaleza y tú.
2) El conjunto Volcán de San Antonio, Faro y Salinas de Fuencaliente, Teneguía mediante. Si tienes furgo, un lugar ideal para llegar cuando todos se van y amanecer cuando aún no ha llegado nadie.
3) La Playa del Charco Verde… porque aquí fuimos muy felices tres días seguidos sin nada que hacer ni nadie alrededor a quien le pareciera bien, mal o todo lo contrario.
La Gomera
Puede ser una de las islas menos llamativas a priori. Sin embargo, además de presumir de tener las mejores vistas de El Teide y todos esos pequeños y tranquilos pueblos que salpican las montañas de la isla, allí está el Monumento Natural de los Órganos y claro, ese Patrimonio de la Humanidad que debe su nombre a los amantes Gara y Jonay.
Curiosidad: hasta hace poco, los semáforos en la isla se contaban con los dedos de la mano y si estás en los áridos barrancos de la zona sur, jamás dirías que a pocos kilómetros al norte hay un bosque lleno de magia.
Nos quedamos con…
1) El Parque Nacional de Garajonay y su continuación en El Cedro. Esta es la razón principal por la que esta isla, es mágica. Esos bosques llenos de laurisilva, deben de ser hogar de todo tipo de criaturas salidas de un cuento.
2) De tan singular que es por el enclave y los miradores para desde allí, admirar todo lo que le rodea, El Roque de Agando es uno de esos espacios especiales en los que pasar un rato oyéndote por dentro.
3) La Playa de la Caleta que, estando muy lejos de ser una playa paradisiaca, tiene un sonido casi más relajante cuando el agua pasa por encima de sus piedras.
El Hierro
Es una isla llena que literalmente, nos ha enamorado. Su ambiente constantemente tranquilo, sus piscinas y charcos naturales, su pinar y sus miradores “a este lado de La Frontera”, son más que razones suficientes para querer volver con todas las ganas antes que a cualquier otra isla.
Curiosidad: El Hierro es una isla 100% sostenible y tiene uno de los fondos marinos más importantes de Europa.
Nos quedamos con…
1) Carretera HI-500 pasando por la Playa del Verodal, el Faro de Orchilla y rodeando sabinas tumbadas por el viento.
2) El cielo y el fondo marino ¿Hay lugares con más espacio y mejores vistas?
3) El Charco de los Sargos porque, aunque los hay más famosos, aquí se está más en paz y a solas.
Es una isla con muuuuucha gente. Se ha construido demasiado destrozando gran cantidad de lugares. Mención especial de esta locura a todo lo que hay entre San Agustín y el Puertito de Mogán (hasta hace unos años, uno de nuestros lugares favoritos). Por eso, nos quedamos con la cumbre de la isla. Sus barrancos, cortantes y formaciones de todo tipo te hacen sentir en otro planeta.
Curiosidad: lástima la persecución salvaje que se le está haciendo últimamente al sector del autocaravaning en Gran Canaria. Una pena no ver el potencial de esta forma de turismo itinerante optando por el “turismo de calidad” de hoteles y apartamentos que sí destrozan el entorno permanentemente.
Nos quedamos con…
1) El Roque Nublo. Aunque desde lejos engaña pareciendo una roquita sin más, una vez allí… es difícil de explicar con palabras cómo de especial es. Nota: fíjate bien en la foto del roque abajo a la derecha.
2) Por su singularidad, no nos queda otro remedio que meter aquí las Dunas de Maslpalomas (a pesar de estar en plena zona mega turística). Pero bueno, si te adentras un poco en la arena, puedes imaginarte a solas en medio del desierto. Un lugar ideal para ver la puesta de sol.
3) El Pico de las Nieves que siendo el punto más alto de la isla, tiene unas vistas que… suspiro, suspiro, codazo, codazo.
Es una isla preciosa la mires por donde la mires. Su paisaje volcánico lleno de silencio es una cosa muy loca. Para nosotros, visualmente, puede que sea la más estética. Sin duda, un destino perfecto para perderse un poco. Nos dejamos fuera muchos lugares como los Hervideros, Papagayo , las Salinas de Janubio o el Charco de los Clicos pero, teniendo en cuenta la esencia de esta lista.
Curiosidad: aunque esto vaya de “espacio”, no podemos dejar pasar la oportunidad de agradecer a César Manrique, el increíble legado que dejó en la isla.
Nos quedamos con…
1) Toooodo el Parque Nacional de Timanfaya lleno de volcanes y coladas de lava. Esa combinación de tonos negros y rojizos a ratos, con ese malpais golpeado con fuerza por el mar, es de una belleza muy difícil de explicar.
2) La Playa de Famara con ese risco que alcanza los 671 metros de altura al fondo y la vista de la isla de La Graciosa algo más lejos es un lugar perfecto para todos esos deportes de agua en lo sque el viento y las olas son protagonistas. Igualmente, darse un baño y, sobre todo, pasear por allí al atardecer, es un gran plan para acabar el día.
3) En La Geria se producen, para nosotros, los mejores vinos blancos de las islas. Allí, donde hoyos de hasta dos metros de profundidad protegen las uvas de malvasia, se puede pasear por uno de los paisajes más singulares de la isla.
Fuerteventura
Esta isla es sinónimo de espacio. Tiene mucho. Lo tiene todo. Sin duda alguna, es la isla más salvaje. La que te pone más a prueba. La que te hace estar más… contigo. Escuchándote. 150 kilómetros de playa y muchos volcanes y montañas para coronar. Viento, sal, arena. Aquí, la vida en cholas, dura todo el año. El espacio también. Distancia social… Distancia natural.
Nos quedamos con…
1) Si esto va de buscar espacio en un lugar interesante que ver, ese es la Playa de Cofete. Una playa sin huellas. Sin gente. Sin hoteles. Pero con mucho “con”. Una maravilla, vaya.
2) En la Playa de Sotavento puedes andar entre dos aguas. Con cometas de kite y wind de fondo y con esos puestos de socorrista a lo lejos que te van marcando el camino.
3) El norte entre volcanes y malpais, recorriendo la costa y parando a ratos en cada lugar “que apetece” hasta que la puesta de sol se te echa encima.
Si estás pensando venir a las Islas Canarias este verano, quizás también te interese echarle un ojo al artículo que escribimos titulado Viajar por Canarias en campervan o vehículo de alquiler.
3 Comentarios
Muy linda la isla , mucho para recorrer me falta espero poder volver ahora post-covid en breve .
¡Muchas gracias por las recomendaciones, tienen unas vistas geniales! Un saludo.
Hay muchos lugares especialmente singulares por aquí 🙂